Cinco Minutos con el Espíritu Santo

Cinco Minutos con el Espíritu Santo

Espíritu Santo regálanos tu alegría

El Espíritu Santo derrama alegría. Varias veces la Biblia habla del “gozo del Espíritu Santo” (1 Tesalonicenses 1,6; Romanos 14,17) y nos invita muchas veces a vivir alegres. Es voluntad del Señor que no vivamos tristes: “No te abandones a la tristeza, ni te atormentes con tus pensamientos. La alegría del[…]

Espíritu Santo sáname en el vientre materno

Ven Espíritu Santo, para que pueda reconocer que mi vida vale la pena, que yo no existo por casualidad o por fatalidad. Ven y hazte presente en el preciso instante en que yo fui concebido. Sopla con tu poder y llena de vida ese instante. Tócame y derrama toda tu potencia[…]

Espíritu Santo arroja de mi toda impureza

Espíritu Santo, tú eres vida, tú eres necesario para mí como el aire que respiro. Te doy gracias por el don de la vida, porque es maravilloso existir. Permíteme respirar contigo, Señor. Te adoro Espíritu Santo, porque así como el aire me rodea y penetra en mí, así también estoy rodeado[…]

Espíritu Santo ayúdanos a descubrirte en el universo

El Espíritu Santo es vida y derrama vida. A veces creemos que él sólo nos lleva a entrar en nuestro interior y a apartarnos del mundo. Pero es al revés, porque el Espíritu Santo llena todo el universo, y él espera que sepamos unirnos a todas las creaturas y a[…]

Espíritu Santo motívanos a alabar al Señor

Por un momento pidamos al Espíritu Santo que nos impulse a la alabanza, y oremos con estos preciosos Salmos: Mi corazón está a punto, Dios mío. Voy a cantar y a tocar… Te alabaré entre los pueblos Señor, te cantaré entre la gente, porque tu amor es grande hasta los cielos[…]

Espíritu Santo no permitas que baje los brazos

El Espíritu Santo no se lleva bien con el pesimismo. Porque a él sólo le interesa lo que pueda ayudarnos a salir adelante, no lo que nos clausure, nos detenga, nos paralice. Las personas movidas por el Espíritu Santo no se dejan vencer ni amedrentar por los fracasos. Tampoco bajan[…]

Espíritu Santo enséñame a seguir tus impulsos de amor.

Ven Espíritu Santo, y enséñame a seguir tus impulsos de amor. Enséñame a intentar cada día reaccionar mejor. Tú conoces mi debilidad, y sabes cuánto me cuesta cambiar mi forma de vivir. Sabes cómo me arrastra muchas veces el egoísmo, el orgullo, la comodidad o la tristeza. Pero enséñame a intentar otra manera[…]

Espíritu Santo enséñanos a escucharte

El Espíritu Santo es un buen consejero. Por eso podemos decirle con el Salmo: “Bendigo al Señor que me aconseja; aun de noche me instruye en mi intimidad” (Salmo 16,7). El Evangelio elogia al justo Simeón porque él “se guiaba por el Espíritu Santo” (Lucas 2,25). Si estamos atentos, el[…]

Espíritu Santo fortalécenos en nuestros sufrimientos

El Espíritu Santo no consiente la mediocridad; siempre quiere llevarnos a algo más. El martirio es una muestra de lo que puede llegar a provocar el Espíritu Santo. Por eso la Iglesia nos propone recordar a los mártires de distintas regiones de la tierra, para reconocer la acción del Espíritu Santo[…]

Espíritu Santo despierta mi vida interior

Ven Espíritu Santo, a despertar mi vida interior. Ven a elevar mi corazón en gratitud. Todo el universo es una alabanza gozosa para el Padre Dios. Lo adoran los pájaros cantando, lo adoran los arroyos corriendo entre los cerros, lo adoran el sol y la luna iluminando. Ayúdame Espíritu Santo, a compartir[…]